Las camisetas de SODEMASA recuerdan esos intercambios de abalorios por oro. Es como la colonización de las tierras para la cristiandad. Peor en este caso. Dado que cada camiseta representa un convertido en esta habilitación administrativa que niega que los "indígenas " tengamos alma.
Sobre esta premisa, concienciar, sensibilizar , convertir, en suma, se muestra como una estrategia burda.
Hasta hace poco esto era Tierra de nadie. Poco a poco esa tierra adquiere un valor político inconmensurable. Y el retorno, camiseta en mano, de los conquistadores que otrora abandonaron a estas comunidades a su suerte, huele a reconquista bananera de la mano de una empresa mercantil que regala camisetas a los vecinos de los Valles.
ES, SIMPLEMENTE INSULTANTE!!!!!!!!!!!